El británico Richard Wright ha ganado el premio Turner de arte contemporáneo, uno de los más prestigiosos de Europa a la par que controvertido por un enorme y espectacular diseño ejecutado con láminas de oro que acapara toda la pared de la galería Tate Britain de London y por el que se ha embolsado un cheque de 28.000 euros. Richard Wright (Londres, 1960) ejecuta intrincadas redes y pinturas en espacios arquitectónicos que son su principal inspiración. Pintor que trabaja en Glasgow, ha sido reconocido por los trabajos expuestos en una galería escocesa que desprenden su fascinación por la arquitectura, la geometría y las matemáticas.
Las otras tres obras finalistas:
-Un espacio abandonado y en ruinas que Hiorns llenó con 90.000 litros de sulfato de cobre para lentamente fueran cristalizando.
-Las esculturas y dibujos de Enrico David, entre las que destaca una forma cónica convertida en figura humana gracias al collage (la cara insertada en la pieza es la del propio artista)
-Las instalaciones que la dibujante Lucy Skaer, la única mujer entre el cuarteto finalista, crea a partir de fotografías.