Carlos Alcaraz continua la senda que marcan los mejores jugadores de tenis de la historia. Esta vez conquistando su segundo título consecutivo de Wimbledon, el cuarto Grand Slam de su carrera, tras batir al serbio Novak Djokovic 6-2, 6-2 y 7-6(4) en una repetición de la final del pasado año en la central del All England Lawn Tennis and Croquet Club de Londres.