Lenny Kravitz, cantante y director creativo de Dom Pérignon, explora una nueva faceta en el marco de su colaboración con la Maison de Champagne: el papel de diseñador. Inspirado por la singular atmósfera que rodea la degustación del champagne, Lenny Kravitz se ha decidido a interpretar esta singular experiencia a través de la creación de una colección de objetos de diseño formada por tres piezas exclusivas.
Lenny Kravitz ha sublimado esta emblemática botella de Dom Pérignon a través de esta colaboración, concibiendo una botella de edición limitada con un acabado de metal forjado a mano en la superficie del icónico escudo. Las botellas de edición limitada están disponibles para Vintage 2008, así como para Rosé Vintage 2006.
Lenny Kravitz escribe un nuevo capítulo de esta visión compartida del savoir-faire en la que cada elemento dota de significado a la búsqueda de la excelencia. El diseño es una fuente de emociones capaz de inspirar las escenas que continuarán con una historia que se escribe gota a gota.
“Quería crear algo que sublimase el ritual de tomar Dom Pérignon, algo que lograse reunir a la gente a su alrededor” - Lenny Kravitz
- La inspiración insuflada por la historia de Dom Pérignon no frenó la reinterpretación de la botella.
- un recipiente para la versión Magnum que mejorara la dualidad y funcionalidad del conjunto de la colección
- un cofre que se transforma en un candelabro. El candelabro, inspirado en el brutalismo, está forrado de terciopelo y reforzado por una textura de piel de serpiente de imitación, lo que crea una armonía idílicamente transformada entre la masculinidad y la feminidad. La pieza inspira a crear una instalación secundaria de elevación en torno al exclusivo ritual de disfrutar de Dom Pérignon.
- Una mesa de champagne. La mesa lacada en negro con un ribete de latón cepillado se despliega para revelar un tesoro oculto: unas botellas de Dom Pérignon, las copas y una cubitera en el centro.
Fuente: Dom Perignon https://www.domperignon.com/