España es una de las candidatas al desarrollo de los aerogeneradores flotantes. La energía eólica de alta mar podría abastecer a millones de hogares, pero apenas se aprovecha. La empresa Iberdrola Renovables es consciente de ello y ya prueba un modelo experimental. El proyecto, denominado Emerge y financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación, tiene previsto desarrollar un primer prototipo a escala real en 2012. En estos momentos, los responsables de Emerge prueban una turbina de tres MW, con una plataforma flotante anclada al fondo. De su éxito depende la combinación de varios agentes científico-tecnológicos: además de la compañía eléctrica, participan Alstom-Ecotecnia, Robotiker, IREC, KV Consultores, Acciona y las Universidades de Cádiz y el País Vasco, entre otras. Si el proyecto funciona, se podrían instalar parques eólicos marinos en zonas con más de 50 metros de profundidad. Más del 70% de la superficie del planeta está cubierta por agua. El mar es el mayor colector solar del planeta y por ello una fuente de energía de gran importancia. La fuerza de las olas y de las mareas es un recurso natural inagotable, que puede proporcionar energía de forma limpia y respetuosa con el medio ambiente. El mar proporciona una forma natural de recoger y concentrar la energía por medio, principalmente, de las olas y las mareas. Para conseguirlo, se están desarrollando diferentes dispositivos capaces de convertir esta energía en electricidad y hacerla llegar hasta tierra.
El principio de los sistemas de energía de las olas consiste, básicamente, en exponer a las olas un dispositivo flotante, en una amplia gama de frecuencias y direcciones, que estaría sometido a movimientos tridimensionales. Estos movimientos se transforman a través de un sistema hidráulico en un movimiento rotatorio y posteriormente se convierte en electricidad a través de un generador eléctrico.