Marc ha asegurado que su principal objetivo era el de “probar este deporte a ver qué me parecía, y la verdad es que al final de la primera bajada ya tuve una buena sensación”. Después de descubrir que este deporte “era mucho más técnico de lo que parecía en un principio y que se necesita una gran preparación física y mental”, Marc ha disfrutado de estas dos semanas de entrenamiento descubriendo que “todavía queda mucho camino por recorrer, pero con más confianza en mí mismo y con más feeling con el trineo puedo hacer un buen papel el próximo año”.

Por su parte, Aleix Alcaraz, que tras sacarse la licencia de piloto en noviembre ya ha tomado parte en algunas pruebas de la Copa de Europa, también ha afirmado que estas dos semanas han sido “más que satisfactorias, ya que he podido empezar a trabajar líneas distintas para coger más velocidad, me he sentido más cómodo sobre el trineo y he podido mejorar mis tiempos en esta pista”.

El expiloto de monoplazas reconoce que “han sido dos semanas muy intensas, con doble sesión de entrenamientos diarios que nos ha hecho llegar muy cansado a los últimos días, pero lo bueno ha sido que he podido mejorar mi pilotaje, mi posición en el trineo y he empezado a tener un feedback con mi entrenador, que en este deporte es algo importantísimo”. Ahora llegan los meses de descanso, pero Aleix ya está pensando en la próxima pretemporada, porque quiere estar “en buenas condiciones cuando vuelva al hielo en octubre”.

Durante su estancia allí, como parte de los entrenamientos, los pilotos tomaron parte en la Tirol Cup, una prueba en la que María Montejano acabó en segunda posición mientras que Aleix Alcaraz finalizó tercero y Marc fue el décimo de los participantes de su categoría.

Fuente: Alberto Montenegro, Departamento Comunicación FEDH