Carolina Marín no ha dado opción a Gilmour, una vieja conocida a la que ya venció en las finales europeas de 2016 (21-12 y 21-18), 2017 (21-14 y 21-12) y 2022 (21-10 y 21-12).

En esta final empezó la española con una marcha más, solida con su servicio y aún más al resto para obligar a Kristy Gilmour a ajustar mucho los impactos. De hecho solo una vez en todo el primer set encajó dos saques seguidos de su rival, cuando esta se puso 15-11. No hubo más concesiones por su parte, ya que no solo no administró la ventaja que tenía, sino que, con un parcial de 6-0, terminó ganando por 21-11.

Más equilibrada comenzó la segunda manga, sin que la onubense pudiera marcharse al paso por los banquillos con una renta superior a los tres puntos (11-8).

En esos márgenes se movió hasta que su oponente se acercó primero tras uno de los mejores intercambios del partido (14-13) y se puso por delante después (17-18). Ahí volvió Carolina a mostrarse agresiva, lo que desembocó en que Gilmour se dejase tres volantes seguidos en la red antes de ceder al primer punto de campeonato en contra.

De esta manera, Carolina Marín agranda su leyenda al sumar el oro de Saarbrücken 2024 a los de Kazán 2014, La Roche-sur-Yon 2016, Kolding 2017, Huelva 2018, Kiev 2021, Madrid 2022. Sin olvidar que Carolina Marín conquistó el título en los Juegos Europeos de Tarnów 2023.

Pero Carolina Marín no sólo es la reina del bádminton europeo, también es una leyenda mundial: es la única deportista que ha ganado tres títulos mundiales (2014, 2015 y 2018), oros a los que hay que sumar la plata de 2023. Además, es la única europea en haber conquistado el oro olímpico (Rio 2016)... un hito que aspira a repetir en dentro de tres meses en los Juegos de París 2024.
Fuente: COE