Los hombres-pájaro formaron parte de la lluvia de Perseidas en el cielo más limpio del Hemisferio Norte para la observación astronómica
Los cuatro hombres-pájaro han cruzado el cielo convirtiéndose en cuatro Perseidas más en una noche en la que podían observarse hasta 500 meteoros por hora, un fenómeno que se produce por el paso del cometa Swift-Tuttle y que este año puede verse con cinco veces más intensidad de lo habitual.
Los atletas han saltado desde 1.800 metros de altura y sobrevolado a 170 km/h el Observatorio del Roque de los Muchachos en el municipio de Garafía en el que se encuentra el Gran Telescopio de Canarias (GTC) - el mayor telescopio óptico de la humanidad-, para terminar la aventura con un aterrizaje histórico con sus trajes iluminados con LED. Un vuelo de una gran complejidad ya que fue realizado en horario de oscuridad absoluta.
“La experiencia ha sido increíble. Literalmente he sentido como si estuviera en un videojuego. Estaba en un túnel negro y sólo veía miles de estrellas en mi cara. Ha sido una visión increíble. Realmente sientes la velocidad, pero como no tienes nada que te rodee, estás ahí fuera en el espacio. ¡Una locura!” comentaba Joakim Sommer.
El salto sobre La Isla Bonita fue realizado desde la aeronave T-21 del Mando Aéreo de Canarias y gracias a la ayuda del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC), del Cabildo Insular de La Palma y del Ejército del Aire.
Además, coincidiendo con los acontecimientos recientes, los saltadores han querido poner su granito de arena dando las GRACIAS a todos los que ayudaron en las labores de rescate y extinción del incendio durante los últimos días.
Créditos fotografías: © Markus Berger y © Daniel López/ Red Bull Content Pool