En este contexto, Testa mantiene un proceso de crecimiento continuado, apoyado en su perfil promotor, lo que le permite desarrollar desde el origen el producto objeto de explotación y alcanzar rentabilidades superiores a las registradas en el mercado.
La cartera está centrada en usos terciarios, oficinas y centros comerciales, aunque mantiene una posición selectiva en otros como hoteles, residencias de la tercera edad, logística..., en diversas localizaciones y en activos de elevada demanda.
Asímismo, la rotación de activos maduros se contempla, siempre que su realización genere fondos disponibles para nuevas inversiones de mayor rentabilidad, y su permanencia en cartera no permita estimar potencial de revalorización significativo en el futuro.
Sus zonas más importantes de influencia siguen siendo Madrid y Barcelona en España, París en Francia y Miami en Estados Unidos.



Testa, la patrimonialista del grupo constructor español Sacyr-Vallehermoso, obtuvo una cifra de negocios de 70,4 millones de euros, un 3,6 % superior a la del año anterior y el beneficio neto rondó el 240 % como consecuencia de la venta de determinados activos. Testa posee una destacada capacidad de generación de ingresos recurrentes, gracias al largo período de vida de sus activos en explotación y de su cartera de clientes, lo que le faculta para crear valor de manera sostenida en el tiempo. A su vez, el potencial de revalorización que poseen sus activos inmuebles permite añadir plusvalías adicionales a los ingresos por renta generados. 




