En una época en la que lo natural está de moda, confesar haber recurrido a algún tratamiento médico estético o haber pasado por quirófano para mejorar nuestro aspecto físico plantea algún que otro inconveniente que muchas no se han atrevido a salvar. Por eso, en la mayoría de los casos, aunque la mejoría física suele ser evidente, muy pocas son las que admiten haber recurrido a los avances científicos para mejorar su naturaleza.