Con más de 140 quilates, 637 diamantes talla baguette, 1 diamante talla rosa para la corona y un movimiento Tourbillon Vendôme para el deleite de los entendidos. Una pieza única, excepcional, una apuesta aún más atrevida, una expresión deslumbrante de savoir-faire para obtener un nivel de pureza, color, talla, acabados y homogeneidad del conjunto que constituyen una hazaña fuera de lo común. En su realización han participado 45 talladores que han trabajado sin descanso durante un mes para tallar las piedras, además de las 2.000 horas que han invertido los maestros engastadores.