Que varias decenas de familias tengan algo que llevarse a la boca es posible gracias a toda una cadena solidaria: el Palace pone los alimentos y la mano de obra; el Ayuntamiento de Madrid, a los voluntarios que hacen los repartos; y el Club Rotary, creador del proyecto, es el que lo gestiona y lo hace viable gracias a distintos inversores como La Caixa, el Banco Santander o Caja Madrid. Ya son diez años repartiendo comidas por diferentes comedores sociales de la capital, en total más de trescientos mil menús gratuitos. No sólo está el Palace, también lo hace el Ritz, el Meliá y hasta 11 hoteles de lujo, cada uno se encarga un día a la semana. Y el programa, se extiende: "Ahora queremos recoger alimentos no perecederos, no cocinados, de forma que las personas que se queden fuera puedan llevarse comida a su casa” nos informa José Canosa, el presidente del Club Rotary. Porque a pesar de los esfuerzos, no son suficientes para todos los usuarios de los comedores sociales que no dejan de aumentar día a día".