El descubrimiento de La Reina del Kalahari, esta excepcional piedra de 342 quilates de color perfecto y pureza absoluta, ha dado lugar a un conjunto de 23 diamantes - El Jardín del Kalahari - de los cuales cinco pesan más de 20 quilates y cada uno de los principales cortes de piedra - cojín, brillante, corazón, esmeralda y pera - está representado. Basándose en el virtuosismo cultivado en el campo de la artesanía artística que ha forjado la reputación de Chopard, seis fabulosas piezas de joyería han surgido de los talleres de Alta Joyería de la Maison.

La colección por sí sola representa casi un año completo de trabajo: miles de horas prodigadas en este esfuerzo por los ojos, el corazón y las manos de los artesanos de joyería Chopard y gemsetters. La colección Garden of Kalahari está completamente construida alrededor de la idea de un encaje de joyas, como el encaje guipure de diamantes con un motivo de corte luminoso.

The Queen of Kalahari

Por la gracia de un diamante rarísimo de 342 quilates, Chopard ofrece el testimonio de su extraordinario saber hacer joyero y crea el aderezo más precioso que jamás haya surgido de sus talleres de Alta Joyería

 Esta es la historia de una flor extraordinaria que apareció en medio del desierto. Sobre una tierra árida, pero fecunda a la vez, ha nacido una joya. Es la historia de una piedra de una belleza conmovedora, pura y radiante, en cuyo corazón palpita la fascinación, renovada sin cesar, de los tesoros que ofrece la naturaleza. 
Es la historia de una piedra absoluta: el diamante Queen of Kalahari.

Lo esencial en resumen
La historia de esta piedra es la de un viaje. Un viaje a través de lo que distingue y hace singular a la casa Chopard: su vivacidad artística y su virtuosidad ténica. Expresa toda la importancia que tiene para la casa ginebrina el dominio de todas y cada una de las etapas que rigen la creación de una joya. A la cabeza de esta casa se encuentra Caroline Scheufele, co-presidenta de Chopard, cuyo impulso jamás ha dejado de llevar a la marca hacia la excelencia y a la exploración de nuevos territorios. Ella es quien ha seguido, paso a paso, la aventura de este diamante extraordinario, ofreciéndole un destino tallado en la eternidad.

El descubrimiento del Queen of Kalahari, (la Reina del Kalahari) este diamante excepcional de 342 quilates, de una perfección y de una pureza absolutas, ha dado origen a un conjunto de 23 diamantes – The Garden of Kalahari, (El Jardín del Kalahari), de los que cinco tienen una talla superior a los 20 quilates. Gracias al virtuosismo de los oficios artísticos que dan tanto prestigio a Chopard, de los talleres de Alta Joyería de la Casa han surgido seis fabulosas joyas.  

Pionera del desarrollo sostenible en el ámbito de la joyería, Caroline Scheufele ha animado activamente a la mina de Karowe a unirse al creciente número de proveedores de Chopard – ya sea de oro, piedras de color o diamantes – y a comprometerse con los criterios de validación independientes del Green Carpet Challenge, promovido por Eco-Age, que reflejan las mejores prácticas posibles en términos de justicia medioambiental y social. Caroline y los propietarios de la mina de Karowe accedieron a recibir la visita del equipo de Eco-Age, para que este llevara a cabo un estudio independiente de todos los aspectos de sus actividades mineras. La mina de Karowe prosigue su propio viaje hacia el desarrollo sostenible, esforzándose para cumplir las normas que se exigen para la obtención de la certificación RJC.

Y como el arte y el cine forman una parte muy importante de la historia y de la identidad de la casa Chopard, cada una de las etapas de esta extraordinaria aventura ha sido filmada por Alexis Veller, que la presentará por medio de una docuficción de 50 minutos. 

El descubrimiento de un tesoro
« Inmediatamente tuve la sensación de que me encontraba ante una piedra extraordinaria. Era de una belleza y de una pureza excepcionales », confía Caroline Scheufele, cuando recuerda la primera vez que vio el diamante que ella misma ha bautizado como Queen of Kalahari. Esta gema fuera de lo común se encontró en el  corazón del yacimiento de Karowe, en Botswana. Surgida de la roca volcánica de la kimberlita, del calor y de la profundidad de los tiempos, este diamante encarna la permanencia y la fuerza de los vínculos que unen al hombre con la tierra.  

342 quilates, una cifra que da fe de un tamaño completamente extraordinario para un diamante de una pureza absoluta y de un color perfecto. El diamante Queen of Kalahari posee un color D, el más bello, y una pureza de grado F (Flawless). « La emoción y la energía que emanan de esta piedra no tienen igual », subraya  Caroline Scheufele, que inmediatamente se desplazó hasta allí mismo, a la mina a cielo abierto de Karowe, para ir a conocer este diamante que se descubrió hace un año. Y fue todo un flechazo. Desde entonces ha supervisado personalmente cada una de las etapas de su recorrido, guiándolo, como una buena estrella, paso a paso, hacia su vestido de luz y dando así origen a las joyas más preciosas que nunca antes habían surgido de de los talleres de Alta Joyería de Chopard.

La audacia creativa 
« Se trata de una piedra totalmente excepcional, pero no queríamos tratarla como si fuera un simple trofeo. Queríamos ofrecerle un destino a su medida », explica Caroline Scheufele. Confiada y conjugada por el inigualable saber hacer de los talleres de Chopard, este diamante de 342 quilates ha encontrado su mejor expresión y su destino más bello dentro de un conjunto extraordinario, formado por 23 diamantes: The Garden of Kalahari (El Jardín del Kalahari).  Cada una de estas piedras, al igual que el diamante que les ha dado la vida, es de un color y de una pureza absolutas.

De estos 23 diamantes, 5 están por encima de los 20 quilates, y en ellos se encuentran representadas cada una de las principales tallas de los diamantes: cojín, brillante, corazón, esmeralda y pera. « Frente a este dimante en bruto teníamos numerosas opciones. Yo quise desplegar todo el abanico de posiblidades y representar todas las tallas de los diamantes ». Una transormación que surgió de la imaginación de Caroline Scheufele, y que, una vez más, da testimonio de la vocación y el saber hacer artístico de la Casa Chopard. Del estado bruto, al aderezo, esta transfiguración de la materia se ha hecho posible gracias al virtuosismo técnico puesto al servicio de una creatividad sin limites. 

The Garden of Kalahari
Visionaria, Caroline Scheufele es el alma creadora de la casa Chopard. Alrededor de estas cinco piedras ha construido una audaz red de nexos poéticos y metafóricos. Bajo su mirada, la radiante talla brillante de 50 quilates se convierte en un girasol, el corazón de 26 quilates en un delicado pensamiento y la pera de 25 quilates en una majestuosa flor del plátano. En cuanto a la perfecta talla cojín de 20 quilates, esta se encuentra mano a mano con la resplandeciente amapola, mientras que la esmeralda de 21 quilates languidece junto al nenúfar. Formas, resonancias y colores que se entrelazan en un paisaje maravilloso, un jardín extraordinario, en el que la poesía, la luz y el resplandor son las únicas reglas del juego. Estos cinco diamantes son las piezas maestras de los 23 diamantes que forman The Garden of Kalahari, el conjunto formado por los diamantes que han surgido del sublime Queen of Kalahari. Alrededor de estas piedras se ha creado una pieza extraordinaria, formada por seis joyas que dan testimonio de la riqueza creativa y el inigualable saber hacer de los oficios artísticos de los talleres de Chopard. La colección representa en sí misma casi un año de trabajo: miles de horas, durante las que las miradas, el corazón y las manos de los artesanos joyeros y los engastadores se han volcado amorosamente sobre esta obra.

Las joyas surgidas del Queen of Kalahari
La pieza maestra de esta colección vibra muy cerca del corazón. La joya del Kalahari, un collar, da fe de todo el ingenio y el espíritu lúdico que rigen la creación en la casa Chopard. Esta pieza se declina sutilmente en cuatro opciones: para empezar, una gargantilla, sublime y muy moderna, para llevar sola. Por la gracia de un mecanismo totalmente invisible, esta se separa en el centro para ennoblecerse con una sublime flor y convertirse así en una opción más sorfisticada. Y para las grandes fiestas, esta misma flor se convierte en la base para tres colgantes de grandiosa belleza, puesto que están adornados con los tres diamantes más grandes del Garden of Kalahari: el brillante de 50 quilates, el corazón de 26 quilates y la pera de 25 quilates. Cada una de estas piezas se puede llevar sola o en conjunto, para culminar en el collar perfecto con las tres piezas unidas. 

Y como en Chopard la belleza no está lejos de la fantasía, dos de las piezas, el diamante talla corazón y el diamante talla pera, se pueden llevar a modo de pendientes, como un sublime aderezo, en conjunto con el collar, adornado o no con la flor y el diamante talla brillante. Los pendientes también se pueden usar sin las piezas de los diamantes talla corazón y pera, para una versión más discreta. Una idea realmente singular y muy moderna de la belleza, que deja a su propietaria libertad para combinar los quilates y las formas y que permite cambiar de joyas según el humor, la ocasión y los deseos…

Esta colección todavía se enriquece aún más con un brazalete adornado con dos diamantes talla esmeralda y dos sortijas, de las que una lleva un diamante talla cojín de 20 quilates y, por supuesto, y a modo de homenaje a las raíces relojeras de la Casa Chopard, un impresionante reloj secreto, tan delicado por su naturaleza como por su realización. Toda la colección del Garden of Kalahari está diseñada alrededor de la idea de un encaje joyero, como si de un guipure de diamantes perforado de luz se tratara, un diseño desarrollado para la coleccion icónica Precious Chopard, que se ha convertido en la línea de la Alta Joyería de Chopard.

La Alta Joyería de Chopard 
« Realmente los talleres se han superado a sí mismos en cuanto se refiere a su labor en este proyecto tan excepcional, y además se han reforzado las sinergias entre todos los diferentes oficios », cuenta Caroline Scheufele. En los talleres de Chopard, todo da comienzo a través de una historia que tiene que ver con las manos. Las manos expertas, pacientes e imaginativas de los artesanos de la manufactura, que se van volcando sucesivamente sobre estas piezas de excepción. Esta fluidez y esta complementariedad entre los diferentes talentos se ha hecho posible mediante el agrupamiento de más de 30 oficios bajo un mismo techo. Un patrimonio que la familia Scheufele cultiva cuidadosamente, volcándose en la trasmisión del saber hacer de generación en generación y en su formación. Chopard sabe bien que el capital más importante de todos es el capital humano. Las creaciones de Chopard se inscriben en la más pura tradición de la Alta Joyería y los oficios artísticos se elevan hasta su nivel más alto: joyeros escultores en cera, joyeros, lapidarios, engastadores o incluso pulidores… Desde las líneas a los volúmenes, desde el trabajo sobre el oro, hasta el trabajo de las piedras preciosas, todos van más allá de los límites de lo posible y dan vida, mediante la conjugación de sus talentos, a las joyas más prestigiosas.

The Garden of Kalahari es la prueba del virtuosismo de los artesanos involucrados en su realización y del ingenio fundamental para su concepción, situados bajo el alto patrociono de Caroline Scheufele, co-presidenta de Chopard. Nacida bajo su impulso y regida por las líneas que ella misma marca, a lo largo de estos años la Alta Joyería se ha desarrollado de una manera espectacular en la Casa Chopard y ocupa, para siempre, un lugar preponderante en el mundo contemporáneo de la Alta Joyería. Inspiradas por la naturaleza, nutridas por este sentido tan especial de la estética y de la ética, propios de los talleres de Chopard, estas joyas son fuente de una fascinación que se sigue renovando sin cesar.

Características
Necklace in 18ct white ‘Fairmined’ gold adorned with three exceptional D-flawless 50cst brilliant-cut, 26cts heart-shaped and 25cts pear-shaped diamonds, a D-flawless 6.41-ct brilliant-cut diamond and fully set with pear-shaped (98cts), brilliant cut (40cts) and marquise-cut (2cts) diamonds.
Ref. 810442-1001

Earrings in 18ct white ‘Fairmined’ gold adorned with two exceptional D-flawless 25ct pear-shaped and 26ct heart-shaped diamonds and fully set with pear-shaped (4.55cts) and brilliant-cut diamonds (4.35cts).
Ref. 849965-1001

Ring in 18ct white ‘Fairmined’ gold adorned with an exceptional D-flawless cushion-cut diamond of 20cts and fully set with brilliant-cut (3.9cts) and pear-shaped (3cts) diamonds.
Ref. 820985-1001

Secret watch in 18ct white ‘Fairmined’ gold set with two exceptional D-flawless pear-shaped and brilliant-cut diamonds and fully set with brilliant-cut and pear-shaped diamonds. Equipped with a Haute Horlogerie L.U.C 96.17-L caliber; micro-rotor in platinum set with diamonds.
Ref. 104414-1001