Desde que, en el 2000, el francés Christophe Lemaire asumió la dirección creativa de Lacoste, la firma del cocodrilo ha ido dejando atrás el carácter deportivo en beneficio de un nuevo sentido del chic urbano. Esa transformación queda patente en la nueva colección otoño-invierno 2009-2010 llega hasta la marca, que se reduce considerablemente y se confunde con las prendas. Lemaire explicó que su colección busca una elegancia y una sofisticación relajada pero claramente más abstracta, cálida y cómoda, de tonos puros y neutros. Blanco, crema, gris y, como únicas concesiones al color, el azul y el yema pastel, dominan unas piezas que deambulan entre los cortes masculinos de pantalones, camisas y corbatas, y los volúmenes futuristas de los conjuntos de una pieza, las capas y los abrigos de lana.