La empresa de servicios funerarios Mémora presenta una línea de trajes para difuntos diseñados por Antonio Miró, que es una novedad en el sector y en todo el mundo. Los trajes de Miró están hechos de algodón tienen dos versiones, para mujer con falda y para hombre con pantalón, y sustituyen a la tradicional mortaja o al traje aportado por la propia familia y cuestan unos 150 euros. Y para la empresa Marcs Umas Bach el diseñador ha creado dos modelos de ataúd, uno de corte clásico, rectangular, de madera de nogal y atravesado con estrías e interior de terciopelo, el otro de fibra de un llamativo color azul, sin bisagras y con unas curvas que le dan un aspecto de lo más futurista, a medio camino entre una cápsula espacial y la revisión del histórico sarcófago egipcio adaptado a nuestros días.