Tres círculos delimitan las funciones principales del movimiento:
- Reserva de marcha a las 10h, horas a las 2h y tourbillon volante a las 6h.
- La caja está disponible en oro rojo, titanio o titanio con acabado de DLC negro.
- La correa de caucho negro presenta un revestimiento de alcántara azul.
FICHA TÉCNICA Reloj Bovet 1822 Tourbillon Volante Ottantasei
Edición limitada a 86 piezas en titanio y 86 piezas en oro rojo 18K
CAJA
Tipología: Pininfarina
Diámetro: 44mm
Grosor (con cristal): 12mm
Grosor (sin cristal): 8.85mm
Peso del oro: 51,66 gr (oro rojo) / 15,54 gr (titanio)
Material de la caja: Oro rojo 18K, titanio o titanio con DLC negro
Correa: Caucho negro
Hebilla Ardillon en oro 18K
Resistencia al agua: 30m
PATENTES
Sistema de carga esférica
Tourbillon doble cara
Tren tridimensional de engranaje múltiple
MOVIMIENTO
Calibre: 17BM03MM
Tipología: Carga manual
Diámetro: 17’’’
Frecuencia: 18’000 vph
Reserva de marcha: 10 días
Tourbillon: Tourbillon volante de 1 minuto
ESFERA
Lacada en blanco o cepillado circular sobre esfera azul
Funciones: Horas, minutos e indicador de la reserva de marcha
Reloj Bovet 1822 Tourbillon Volante Ottantasei diseñado por Pininfarina
Este cuarto tourbillon marca un importante punto de inflexión en el desarrollo de la colección, al mismo tiempo que resalta las características distintivas de su diseño. El Tourbillon OTTANTASEI permanece fiel a las líneas esenciales de la colección fijadas por el Tourbillon Ottanta® en 2010. Mientras una simple mirada es suficiente para confirmar su pertenencia a la familia BOVET by Pininfarina, el Tourbillon OTTANTASEI está repleto de innovaciones técnicas y cambios estilísticos, todos armoniosamente planificados alrededor de una serie detallada de especificaciones.
La palabra “light”, con su doble connotación de luminosidad y ligereza, ha sido el lema en cada etapa del desarrollo de este proyecto.
La caja del guardatiempo encarna plenamente esta “filosofía”. Los técnicos y relojeros de la Manufactura DIMIER 1738 y los creativos de Pininfarina juntaron su saber hacer para ofrecer una perspectiva inédita de la originalidad y la excelencia tecnológica del movimiento, una vez más desarrollado y manufacturado completamente por BOVET.
Cuatro grandes cristales de zafiro ocupan las superficies principales, mientras unos elementos de titanio u oro en contraste delinean los contornos esenciales del diseño de la colección y garantizan los atributos necesarios para su carácter deportivo. Mucho más que una simple caja, evoca el mundo de la aviación y el cristal que envuelve la cabina de mando en un avión o helicóptero. Sin mostrar esta inspiración de forma explícita, los creativos italianos y los técnicos de BOVET 1822 estudiaron a fondo el tema durante el desarrollo de la caja, puesto que las restricciones en materia de rigidez, transparencia y resistencia al agua son relativamente parecidas. Para lograr un máximo de ligereza y transparencia, el cristal superior y el inferior presentan formas complejas y específicamente estudiadas.
Dos largos cristales laterales encierran la caja y abrazan perfectamente su perfil. La cuidadosa manufactura y la delicada metalización de los cristales de zafiro permiten admirar el movimiento, mientras el toque de elegancia que caracteriza a las dos Casas está presente en las palabras grabadas con láser, ‘Pininfarina’ y ‘edición limitada’, en las superficies cóncavas interiores de estas paredes de cristal zafiro. Tampoco pueden faltar los tornillos específicamente diseñados por Pininfarina y presentes en todos los guardatiempos de la colección. En cuanto a la corona, aunque la superficie circular es idéntica en todos los tourbillones de la colección, la parte superior está engastada con un cristal zafiro que presenta el emblemático logo Pininfarina grabado con láser sobre una superficie pulida—una forma ingeniosa y estéticamente sorprendente de resaltar la tercera dimensión.
La caja del Tourbillon OTTANTASEI presenta también un ingenioso sistema de cierre a través del fondo, que ofrece una mayor transparencia y ligereza, así como unas dimensiones óptimas que garantizan una ergonomía absoluta. ¡El peso neto del metal de toda la caja es de 51.66 g para el oro y 15.54 g para el titanio! Con sus 44 mm de diámetro y un grosor de 8.85 mm y 12 mm con y sin cristal zafiro respectivamente, el Tourbillon OTTANTASEI ofrece el máximo del cómfort a cualquier muñeca.
Una mirada rápida al movimiento es suficiente para entender que allí una vez más todos los esfuerzos se han concentrado en los principios de ligereza y transparencia. Tres círculos distintos delinean los órganos y las funciones esenciales del movimiento, con el equilibrio y la armonía tan importantes para Pascal Raffy. El ojo capta en primer lugar el único barrilete y su indicador de la reserva de marcha concéntrico a las 10 horas. A continuación, se mueve hacia las indicaciones de las horas y de los minutos que presentan la misma configuración a las 2 horas, para terminar con el tourbillon volante en el espacio aéreo dejado libre a las 6 horas.
Aparecen, en orden, el órgano motor (y su indicador de la reserva de marcha), las indicaciones y el órgano regulador. No podría ser más claro. Para entender realmente la densidad y la coherencia absoluta de este nuevo calibre, tenemos que desvelar cronológicamente sus secretos empezando por el exclusivo sistema de carga. La autonomía de 10 días del Tourbillon OTTANTASEI debería imponer un número de giros de la corona dos veces superior al requerido por el diferencial esférico desarrollado y patentado por los relojeros de DIMIER 1738. La extrema miniaturización de este mecanismo les ha llevado a depositar una segunda patente para el tren tridimensional de engranaje múltiple, que ha reducido drásticamente el volumen, optimizando la funcionalidad del reloj. Se podrá dar cuerda al guardatiempo en la mitad de tiempo, transmitiéndole la energía necesaria para una autonomía de 10 días.
La platina que sujeta todo el movimiento resalta la perfectamente lograda y delicada sinergia entre ligereza y transparencia por un lado, y una mayor rigidez estructural por el otro. Es necesaria una media jornada de mecanizado y de electroerosión para crear una única platina. Después, los artesanos del taller de decoración necesitan un día entero para lograr un acabado de una calidad inigualable. El pulido con chorro de arena, decorado, perlado, Côtes de Genève y achaflanado a mano son solo algunas de las operaciones artesanales que se suceden en el proceso, donde el mínimo percance puede causar daños irreparables. Esta auténtica magia tridimensional incluye la decoración y especialmente el biselado de ambos lados de la platina, así como de sus paredes verticales.
Para lograr las espectaculares prestaciones técnicas del Tourbillon OTTANTASEI, los relojeros optaron por un único barrilete con unas características extraordinarias. Con una longitud de 1.04 m y una potencia desarrollada de 1 kg, puede aportar 240 horas de energía con una regularidad óptima. En sintonía con el espíritu del guardatiempo, el barrilete está esqueletado con el símbolo de la rueda de cinco radios elegido para el diseño de este calibre. Está presente también en distintas partes de la platina, del puente del barrilete, del trinquete y del puente del tourbillon.
Al igual que las características decorativas detalladas a continuación, el tren de engranajes y sus acabados encarnan perfectamente el espíritu de la alta relojería representado por BOVET 1822 y su Manufactura DIMIER 1738. Cada rueda del tren de engranajes ha sido meticulosamente achaflanada y biselada a mano, mientras que los pivotes de sus ejes giran según el método tradicional con una calidad y prestaciones que rozan la perfección. Este tren de engranajes nos conduce del barrilete a las indicaciones y finalmente a la espectacular jaula del tourbillon.
La original jaula del tourbillon volante está compuesta por 104 componentes. Sus muchas innovaciones incluyen un único puente en el centro de su eje. Además del equilibrio de las masas y la reducción del efecto palanca, la jaula del tourbillon parece moverse más libremente que nunca en su propio espacio. Esta ingeniosa construcción se debe a la patente del tourbillon de doble cara, que presenta el escape y el balancín-espiral a ambos lados del punto de fijación central, permitiendo mejorar las prestaciones cronométricas y la calidad estética, desvelando el escape y el balancínespiral a ambos lados del calibre. Esta construcción innovadora y su único punto de fijación contribuyen al grosor perfectamente controlado del movimiento y del mismo guardatiempo.
Las 18,000 A/h del balancín están logradas por una espiral manufacturada en los talleres de DIMIER 1738—un arte que dominan menos de diez casas relojeras a nivel mundial. El aro del balancín-espiral es una copia exacta del que presenta el legendario tourbillon Ottanta®. Acabado en el azul del logo corporativo de Pininfarina, dibuja la forma de un ocho rodeado por un cero, que caracteriza a las distintas ediciones de tourbillones de la colección.
Otros factores que evidencian la pertenencia del Tourbillon OTTANTASEI a la familia BOVET by Pininfarina incluyen los acabados desarrollados y diseñados específicamente para la colección, que magnifican las alternancias de superficies y volúmenes del movimiento. Se encentran 34 tonalidades que van del negro al blanco, repartidas en las distintas capas que componen el volumen de este movimiento. Lo mismo pasa con el acabado Clous de Paris circular bipolar que fue desarrollado exclusivamente para los tourbillones de la colección y que aquí se presenta en dos magníficas placas atornilladas al puente del barrilete.
Este viaje mágico al corazón de un movimiento transparente nos conduce al impresionante indicador de la reserva de marcha. El barrilete engrana con una rueda que gira en un sentido o en el otro, dependiendo si se da cuerda al reloj o si el mismo se descarga durante el funcionamiento. El centro de su eje presenta un tornillo alimentador sobre el que se mueve verticalmente un cono de acero minuciosamente pulido. Cuando se da cuerda al reloj, el cono se coloca encima del tornillo y activa una palanca contra su pared a través de un rodillo de rubí. El segundo brazo de esta palanca culmina en un rastrillo dentado que engrana un piñón colocado en el eje del indicador. De esta forma, mientras se da cuerda al reloj, la aguja incrementa los valores que recorre y los “consume” con el movimiento contrario cuando el guardatiempo está funcionando, ofreciendo una indicación precisa e inédita de esta preciosa función.
Como de costumbre, las dos esferas de este guardatiempo fueron enteramente manufacturadas en los talleres de BOVET 1822. Tratándose de finos anillos y no de sólidos discos, las distintas operaciones de mecanizado, decoración, lacado y tampografía, necesitaban el cuidado y el inigualable saber hacer de los artesanos de la Maison para alcanzar la excelencia que sigue caracterizando a BOVET 1822 después de casi dos siglos. El blanco inmaculado del lacado de la esfera es otra alusión a la historia de la Casa y a los relojes de bolsillo que manufacturaba a principios del siglo XIX. Tres distintas opciones de caja están disponibles para los coleccionistas, que podrán elegir entre el oro rojo de 18 quilates, el titanio grado 5 o el titanio grado 5 con acabado de DLC negro. Para completar la coherencia de toda la colección, la tradicional correa de caucho negro presenta un diseño refinado, un revestimiento de alcántara azul y la tradicional hebilla de la colección en el mismo material elegido para la caja. Una vez más en esta colección, el número de movimientos manufacturados será limitado—en este caso 86 por cada color de caja. Una placa con el número individual de cada movimiento será meticulosamente atornillada al fondo de la caja elegida.
El virtuosismo de los artesanos de la Manufactura BOVET, unido a la excelencia técnica y a la fiabilidad de los distintos mecanismos y a sus inimitables acabados, permiten mostrar todos los aspectos de este calibre excepcional en perfecta transparencia. Alentado por la excelencia demostrada a diario por los artesanos de BOVET 1822 en cada una de sus creaciones, Pascal Raffy ha decidido conceder una garantía internacional de cinco años como prueba de la inmejorable calidad del Tourbillon OTTANTASEI … en toda su transparente magnitud.