El encargado de la decoración ha sido el arquitecto francés Bruno Moinard, que lleva unos años colaborando con Cartier en el desarrollo de su imagen y escenografía. El resultado es un espacio diáfano, con juegos de sombras y luces, que concentra la atención en las exclusivas piezas que realizan en la maison, como pueden ser la emblemática pulsera Love, el codiciado Tank Français o la nueva fragancia masculina Roadster.
A la fiesta asistieron un nutrido grupo de personalidades del mundo de la política, empresarios y muchas caras conocidas del ámbito social.
La cinta inaugural fue cortada por la alcaldesa de Marbella, Ángeles Muñoz en presencia de Philippe Guillaumet, director general de Cartier en España, Simoneta Gómez Acebo Borbón, directora de relaciones públicas y prensa y Reyes García-Valdecasas, directora de la joyería Cartier, entre otros.