El mayor y más caro crucero del mundo comienza su singladura con mucho lujo y gran diversión.El gigante de los cruceros, con un coste de 900 millones de euros ha sido encargado a la naviera STX por la compañía estadounidense Royal Caribbean. Tiene capacidad para 6.360 pasajeros y 2.000 miembros de tripulación, cuenta con 16 puentes repartidos en sus 65 metros de altura por encima de la línea de flotación y mide 360 metros de longitud por 47 metros de anchura, sobrepasando así por 32 metros al 'Freedom of the Seas', hasta ahora el mayor navío de cruceros del mundo. La STX Finlandia, filial del constructor naval surcoreano STX, lo entregará a la Royal Caribbean en una ceremonia de botadura en el puerto de Turku, en el suroeste de Finlandia. Una vez en el agua, el 'Oasis of the Seas' atravesará el Océano Atlántico para llegar a la costa este de Estados Unidos, desde donde el 1 de diciembre emprenderá su primer crucero turístico entre Fort Lauderdale y Haití. Según la Royal Caribbean, este gigante es el "barco más innovador y original que existe en la actualidad, con zonas de diversión que son como pequeños pueblecitos de playa".

Existen pocas marcas en el mundo que se dediquen actualmente a los Cruceros StarClass. Son cruceros de lujo, que ofrecen un oasis exclusivo de glamour y confort en alta mar. No son de dimensiones gigantes, ni son rascacielos en el mar. No se dan aglomeraciones, ni colas, ni limitaciones por espacio, no hay instalaciones anticuadas. Son barcos de tamaño mediano, incluso pequeño pero con espaciosos camarotes tipo suite, amplios espacios en todo el barco y con un ratio de metros cuadrados por pasajero. El servicio es personalizado, atento y muy cuidado. También destaca su alta gastronomía, con chefs renombrados.

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