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Tras un breefing liderado por los responsables de la marca, e instructores, en el que nos explicaron cuál era el programa del día, nos dirigimos al pit lane, donde una caravana compuesta por los nuevos Audi R8 y el Audi RS6 nos esperaban para ser pilotados.

La primera de las pruebas que llevamos a cabo, fue la de mejorar nuestra trazada en curva, para ello, nos dirigimos a la zona final del circuito que había sido dividido para poder llevar a cabo los ejercicios previstos.

Nos subimos en el nuevo Audi R8 V10 Plus que en esta versión dispone de 610cv. El sonido del motor es totalmente embriagador, y más si cabe, cuando estiras el motor en un trazado como este. Ya habíamos tenido ocasión de poner a prueba al R8 V10, en su anterior versión (http://goo.gl/zCXUhi), por ello, queríamos ahora comprobar como Audi lo había mejorado.

La caravana de 4 coches más el del instructor, tomamos rumbo a trazar la última sección del circuito, donde y siguiendo a este para copiar su trazada y memorizar para las vueltas libre el paso por cada una de las curvas, apreciamos la capacidad de tracción, así como el aplomo que es capaz de ofrecer este nuevo R8, que ha sido modificado en gran parte para mejorar a su predecesor.

El segundo de los ejercicios nos lleva a la recta del circuito, allí, con el Audi RS6, teníamos que hacer un ejercicio de frenada con esquiva dentro de un carril señalizado con conos. La velocidad de aproximación a este ejercicio era más o menos de unos 115 km/h, hasta llegar a los dos conos de entrada al carril, donde debíamos dejar de acelerar para frenar con contundencia, llevando nuestra vista al final del mismo para no golpear los conos que simulaban un objeto al que debíamos no golpear. Gracias a los controles como el ABS y el control de estabilidad, es posible hacer esta maniobra permitiendo incluso modificar la trazada mientras frenas para evitar una colisión. Sin duda, este ejercicio es muy útil para aprender que en caso de una situación así, has de pisar el pedal del freno como si la vida te fuera en ello. En este caso, el RS6 mostró su gran capacidad de frenado, sobre todo gracias al sistema de frenos carboceramicos que equipaba.

Llegamos a nuestra última prueba, para ello, nos subimos otra vez a bordo del Audi R8 con el fin de ir a la primera sección del circuito para de nuevo mejorar la trazada y terminar con ello las pruebas que habían preparadas, con el objetivo de poder dar ahora cuatro vueltas al trazado de GP.

Entramos al pitlane, para ponernos los cascos, ya que Audi en todo momento y en estos cursos, tiene como algo que prevalece la seguridad de todos sus clientes. Escogemos uno de los R8 que había en la caravana, y entramos a pista con él.

Ya habíamos como os hemos comentado antes, puesto a prueba una de las versiones V10 del R8, y también nos habíamos puesto tras el volante del R8 con motor V8 en dos ocasiones, y os aseguro, que como esta última, pocos coches son los que hemos tenido ocasión de probar en un circuito que nos hayan dado tantas sensaciones juntas.

El motor V10 de 5,2 litros, es muy elástico, tanto que puedes llegar a ver como el cuentarrevoluciones del nuevo cockpit que es totalmente digital sube hasta las 9.000 rpm con mucha facilidad. Es capaza de acelerar de 0 a 100 km/h en tan solo 3,2 segundos, a la vez que lanzarse hasta los 330 km/h.

Durante las cuatro vueltas que dimos al circuito, siguiendo el rastro de nuestro instructor, saboreamos cada una de las trazadas que con este Audi R8 es fácil hacerlas con una velocidad de paso por curva muy elevada, pues ofrece un aplomo y una capacidad de tracción envidiable. Claro está, que para preservar nuestra seguridad y la de los otros periodistas, tuvimos en todo momento los controles electrónicos activados, y condujimos con el modo Dynamic activado, pero sin poder utilizar el modo performance que te permite, como pudimos comprobar en la vuelta que dimos con Miguel Molina, llevar al Audi R8 un paso más allá en lo que a conducción deportiva se refiere.

Este nuevo coche, dispone de una frenada más contundente que el modelo anterior, así como de un aplomo que a altas velocidades ha sido mejorado, en la parte delantera del coche que antes acusaba algún que otro titubeo.

El cuadro de mandos, que es totalmente personalizable, nos permitió escoger información adicional con unos indicadores de potencia, uso del par motor y de la fuerzas G a las que se sometía el coche a la hora de acelerar, frenar y pasar por curva.

Cuando bajamos del coche, tras las vueltas que dimos, compartimos con los responsables del departamento de prensa de Audi, nuestras sensaciones, y llegamos todos a la conclusión de que este nuevo Audi R8 es tan sencillo de conducir que asusta.

La jornada finalizó con la tradicional entrega de diplomas a todos los conductores que habíamos realizado el curso y con una comida que nos brindó a todos la ocasión de compartir los buenos momentos que habíamos pasado tras el volante de dos deportivos como los son el Audi RS6 y el nuevo Audi R8.

Escrito por, Miguel Angel Solá

Agradecimientos

·         Audi España

·         Fotografías: Audi y Miguel Angel Solá