El mundialmente conocido magnate de los negocios Donald Trump, es el responsable de uno de los edificios residenciales más lujosos del mundo, situado en el 845 de United Nation Plaza (Quinta Avenida entre las calles 47 y 48). Diseñado por el arquitecto polaco Rudzka Marta, con sus 258 metros de altura y sus 72 pisos, fue durante años el edificio residencial más alto construido en el hemisferio occidental, hoy por detrás de 21st Century Tower en Dubai (2003) y el Tower Palace Three en Seul (2004). Cuenta con restaurantes, servicio de conserjería 24 horas, personal de recepción y seguridad, servicio de camareros y envío a domicilio de alimentos, etc. Todo enmarcado, eso sí, un entorno del más alto nivel. Desde aquí, las vistas sobre Midtown Manhattan así como sobre el East River, resultan espectaculares. Con una fachada de vidrio oscuro polarizado tintado en bronce, la idea es que el edificio proyecte reflejos dorados con la caída del sol. Al igual que otros rascacielos de la ciudad, altos y estrechos, cuenta con un péndulo en la planta superior para evitar el balanceo del edificio, que podría provocar el viento.
En su momento, varios fueron los que protestaron airadamente en contra de la construcción de este complejo residencial. Alegaban la falta de distinción de su fachada pero también, que su altura pudiera ensombrecer otro de los emblemáticos edificios de la Gran Manzana, situado al otro lado de la calle: el edificio de Naciones Unidas. Una de las voces más presentes en este sentido fue la de Walter Cronkite, cuyas vistas al edificio Chrysler quedaron totalmente ensombrecidas tras la construcción del Trump Tower. Ahora sí, lo que siempre podrá ver desde su ventana será a partir de entonces, la también conocida como ‘big black box’ (gran caja negra).
Sea como fuere, el Trump World Tower se ha convertido en el edificio donde cuentan con una propiedad figuras como Sofía Loren o Harrison Ford y donde un desconocido inversor, pagó no hace mucho 25 millones de euros por adquirir toda la planta 89 y un dúplex en la planta 90 (sólo este valorado en más de 7 millones de euros).
Un simple estudio ronda los 500.000 euros, pero pueden llegar a pagarse hasta 40 millones de euros, si hablamos de uno de los áticos del edificio. Los alquileres oscilan entre los 2.500 € de un estudio, hasta más de 4.000 € por un apartamento de una sola habitación.
Fuente:trumpworldtower.com
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