La destilería de Laphroaig (los medios de comunicación la denominan como: “el hueco hermoso de la amplia bahía”) fue establecida en 1815, por Alex y Donald Johnston. Los hermanos de “Johnston” eran realmente McCabes, del Clan Donald, que cambiaron sus nombres durante la rebelión jacobita en la isla de Islay. Laphroaig refleja la historia de una comunidad. Un grupo de personas exigentes, tenaces y decididas que trabajan para garantizar que este característico whisky siempre permanezca fiel a sus raíces. Unas raíces que se pueden encontrar en la propia Islay: su severo clima y su difícil paisaje han dado lugar a una gente robusta, cuya sinceridad y sentido práctico resultan tan distintivos como el propio Laphroaig. "Existen tres ingredientes principales para la fabricación de Laphroaig: la cebada, el agua y la levadura, si bien, el ingrediente secreto es la gente".