Auténtico automóvil de culto en Japón, en Europa es un gran desconocido, aunque ello no impide que el Nissan GT-R tenga ya un sitio reservado entre los mejores deportivos del planeta. La historia del este coche de carreras de calle es la historia de la evolución constante, de la búsqueda de la perfección en materia de eficacia y prestaciones. De este modo, el nuevo GT-R, en su última evolución, es todavía más rápido. Agresivo y letal como un guerrero ninja, el GT-R 2013 es un coche mejorado respecto a la anterior generación. Partiendo de un automóvil que ha ganado premio tras premio, Nissan ha llevado a cabo un trabajo fabuloso para convertir su GT-R en rival directo de, por ejemplo, un Porsche 911 Turbo o de un Ferrari 458 Italia. Casi nada. Mantiene el motor V6 con doble turbo y la tracción total permanente como señas de identidad y, por supuesto, su tremenda eficacia sobre asfalto. Más capacidad de aceleración, más apoyo aerodinámico, más agarre y más disfrute al volante era lo que prometieron los técnicos japoneses cuando lo presentaron. Y no hay duda de que han cumplido su palabra. De entrada, el motor V6 con doble turbo rinde 550 CV de potencia mientras que el consumo disminuye hasta los 11,8 litros de media. También estéticamente el coche recibe algunos cambios, que en el caso del paragolpes delantero sirven a la vez para aumentar la fuerza vertical hacia el suelo. El nuevo diseño del paragolpes incluye ahora luces diurnas de tipo LED y entradas de aire dimensionadas para mejorar la refrigeración del potente motor. Con todo ello se consigue un mejor coeficiente aerodinámico y un aspecto global todavía más agresivo, sobre todo visto por detrás con unas imponentes salidas de escape, la anchura del coche y los neumáticos 285/35 con llanta de 20 pulgadas. El cambio secuencial de seis velocidades, con levas de magnesio en el volante, incorpora un programa llamado SAVE que tiene la función de reducir el consumo cuando se conduce por vías rápidas.
Sin límite aparente
El GT-R es un coche radical de pies a cabeza. Una máquina de correr que no acepta términos medios. En general se puede decir que es bastante incómodo y que se adapta mal a la ciudad, ya que es fácil rozar con la parte baja del paragolpes a la entrada o salida de cualquier aparcamiento. El chasis del GT-R es extremadamente rígido, pensado casi para rodar en circuito. Afortunadamente, existe un modo confort en la suspensión que permite circular con un mínimo de comodidad. El coche ha sido desarrollado con aceros de alta resistencia, aluminio, fibra de carbono y fibra de vidrio para carenar los bajos del coche. Al arrancar, desaparecen los tirones del sistema de tracción total que tenía antes. La motricidad, la capacidad de transmitir toda la potencia a las ruedas, es impresionante y el coche muestra una estabilidad lineal sólo a la altura de los mejores deportivos del mundo. En recta, acelerando a fondo, el motor tiene un empuje brutal, pero no hay pérdidas de tracción gracias al sistema 4x4. El motor V6 tiene un comportamiento típicamente turbo, con una respuesta fulgurante a partir de 4.000 rpm y un zumbido altamente estimulante provocado por el soplido de los turbos. Es un automóvil apasionante de conducir por carreteras de curvas, sobre todo sin soltar el volante, utilizando el rápido cambio secuencial, y aprovechando la extraordinaria estabilidad. Incluso con el modo R del control de tracción, que deja deslizar levemente la parte trasera al acelerar fuerte, el coche se muestra sumamente seguro. La frenada también es muy potente y precisa y en pocos metros el GT-R se queda clavado en el asfalto. Uno de los aspectos que más impresionan de su conducción es la velocidad de paso por curva. Pocos coches en el mundo dan una sensación tan fuerte de ir pegados al asfalto.
Constante evolución
La gama del Nissan GT-R se compone de las versiones Premium Edition (106.650 euros), Black Edition (el de la prueba) y Track Pack (119.550 euros), esta última aligerada y con un alerón trasero de carbono, pensada para utilizar habitualmente en circuito. En esta última evolución del GT-R, con 550 CV, los ingenieros han modificado los amortiguadores, los muelles y la barra estabilizadora delantera para aumentar la estabilidad a alta velocidad, mejorar la tracción y refinar la calidad de rodadura. El superdeportivo de Nissan dispone asimismo de un centro de gravedad rebajado para proporcionar una experiencia al volante todavía más apasionante. Con estas modificaciones, el nuevo GT-R 2013 acelera de 0 a 100 km/h en tan solo 2,7 segundos. Es también casi tres segundos más rápido en el tiempo por vuelta en el famoso circuito alemán de Nürburgring. Como curiosidad, las pantallas de información de la consola fueron diseñadas por los autores del juego Gran Turismo de la PlayStation.
PRUEBA
Nissan GT-R Black Edition
FICHA TÉCNICA
DATOS
- Aceleración 0/100 km/h 2,7 segundos
- Velocidad máxima 315 km/h
- Potencia máxima 550 CV a 6.400 rpm
- Consumo carretera 8,8 litros
- Consumo urbano 17,0 litros
- Consumo medio 11,8 litros
- Garantía 3 años o 100.000 km
- Precio 107.750
MECÁNICA
-Motor V6. Gasolina
-Cilindrada 3.799 cc
-Cambio Aut. 6 velocidades
-Tracción 4x4
-Emisiones CO2 275 g/km
DIMENSIONES (cupé)
-Largo/ancho/alto 467/189/137 cm
-Maletero 315 litros
-Depósito 74 litros
-Neumáticos 255/40 – 285/35 R20
-Peso 1.740 kg
Redacción : Francesc Pla
@Quickpla