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A primera vista lo primero que llama la atención son sus ensanchados y musculados pasos de ruedas, que esconden unas llantas de 21” calzadas con unos neumáticos que nada tienen que envidiar a los de su hermano, el R8. La parte frontal, a nosotros, nos parece impresionante, ahí encontramos una rejilla en forma de nido de abeja, y bajo esta el logo de quattro, lo que ya nos hace ver en un primer vistazo que esto no es un A6 corriente. En los laterales encontramos dos sendas entradas de aire y unas específicas que se encargan de llevar aire al poderoso equipo de frenos del RS6.

La parte trasera, está presidida por un difusor de aire, que cuenta con dos enormes salidas ovaladas que proceden de la línea de escape. Os aseguramos que el sonido que estas ofrecen, es algo que tardas en olvidar.

Fabricado de forma artesanal por la factoría que Quattro Gmbh tiene en Neckarsulm donde fabrican todos las versiones R de Audi, han conseguido con respecto a su antecesor y gracias a la tecnología de Audi, rebajar el peso del RS6 en nada menos que 90 kilos, utilizando en la fabricación del coche un 20% de piezas de aluminio.

Su corazón, del que luego os hablaremos con más detalle, es un V8 Biturbo de 4 litros que rinde la friolera de 560 cv, suficientes para hacer sombra, como pudimos comprobar el día que lo probamos, a los mejores deportivos del momento.

Son pocas las ocasiones en las que podemos poner a prueba un coche en carretera y después llevarlo a un circuito, con el RS6, hicimos ambas cosas, y el resultado para nuestro artículo fue más que satisfactorio. Fue aquí, en el circuito, donde nos dimos cuenta que el Audi RS6 es la alternativa racional, cómoda y deportiva para cualquier persona que quiera disfrutar de un coche que es capaz de ofrecerte estas dos cosas a la vez.

Abrimos la puerta del RS6, y comprobamos una vez más el buen hacer de una marca. Con respecto a cualquier A6, aquí encontramos un volante de piel achatado con el anagrama RS en su parte inferior, así como unos impresionantes asientos deportivos de cuero acolchado que sujetan el cuerpo perfectamente en la situación que sea, especialmente a la hora de conducir de forma deportiva.

Las plazas traseras están optimizadas para dos ocupantes, aunque opcionalmente se puede pedir que sea para tres. El maletero, cuya apertura se puede hacer deslizando el pie bajo el paragolpes trasero, tiene una capacidad de 560 litros pudiendo ampliarlos hasta los 1.680 abatiendo los asientos traseros.

El cuadro de mandos, está presidido por dos enormes esferas, que ya hemos visto en otros modelos de la marca. Aquí vemos como el cuentarrevoluciones lleva un anagrama RS6 y nos lleva hasta la 8.000 rpm. La velocidad de 320 km/h en el velocímetro no es una indicación optimista, pues Audi ofrece una versión Plus con la que es posible lanzar este coche hasta los 305 km/h.

El ordenador de a bordo, aparte de ofrecer la información convencional, como consumo, velocidad media, etc., ofrece también información sobre la presión de los turbos. En la consola central encontramos una pantalla de 7” que emerge electrónicamente al poner en marcha el coche, en la que encontramos el navegador, el sistema de audio, el teléfono así como lo necesario para configurar el modo de conducción del coche con el Audi Drive Select. En la parte más baja de la misma, encontramos el selector del cambio tiptronic de 8 velocidades que equipa el RS6 y junto a él, el mando MMI con el que se controlan todas las funciones de la pantalla de la consola.

En lo que a equipamiento se refiere, de serie encontramos llantas de 20”, faros con tecnología LED, inserciones de carbono, asientos de piel eléctricos o el sistema MMI Navegación Plus entre otros. Además, y como a todo buen Audi, es posible personalizarlo de tal forma, que quizás sea impensable que puedas encontrar otro igual.

Entre el largo listado de opcionales encontramos llantas de 21”, techo panorámico de cristal, retrovisores en fibra de carbono, y así una larga lista de cachivaches que pueden convertir al RS6 en un coche si cabe, más exclusivo o deportivo todavía.

El protagonista se halla escondido bajo el capó delantero, que es de aluminio, y es un poderoso propulsor de 4 litros V8 TFSI que rinde una potencia de 560 cv y desarrolla 700 Nm de par motor, cifras más que suficientes para mover con mucha soltura y alegría los casi 2.000 kg que tara este coche.

Este motor, no solo está pensado para su utilización más radical, y por ello equipa, en beneficio de poder ofrecer una cifras razonables de consumo, el sistema COD, que desactiva 4 de los 8 cilindros cuando viajamos a velocidad de crucero o por la ciudad. Con esto el RS6 reduce el consumo con respecto a su antecesor, logrando una media homologada de 9,8 litros. Durante nuestra prueba tan solo nos acercamos a esa cifra, cuando condujimos por autopista, durante unos 80 kilómetros, el resto, mejor no os lo contamos, aunque como se suele decir, sarna con gusto no pica. Cuando adquieres un coche así ya sabes lo que llevas entre manos.

La caja de cambios que equipa el RS6 es una de tipo tiptronic de 8 velocidades, cuyo tacto y funcionamiento es más que preciso. Bien si la utilizas en modo automático, y mejor todavía si la manejas con las levas del volante, para conseguir todavía más si cabe unos cambios más refinados.

Uno de los extras para disfrutar del potencial y sobre todo del sonido de este V8 es el sistema de escapes deportivos. Cuando aceleras emiten un sonido bronco y muy singular, pero cuando reduces, los petardeos que emiten son alegría para los oídos.

En lo que a dinámica se refiere, el RS6 está equipado con un elenco de sistemas que velan por la tracción y el comportamiento dinámico. De serie equipa una suspensión neumática que se adapta al estado de la carretera, además de reducir la distancia al suelo 20mm para conseguir así un tarado más firme. Para modificar el comportamiento del coche, recurrimos al “Audi Drive Select” que nos permite escoger entre 4 modos  de conducción diferentes,y del que solo quieres comprobar cómo funciona el Dynamic.

El sistema de tracción quattro dispone de un diferencial central autoblocante capaz de repartir el par motor en proporción 40% delante y 60% al eje trasero en condiciones normales y hasta un 85%, gracias al diferencial trasero deportivo que equipa, lo que te lleva en algunos casos a pensar que estás conduciendo un tracción trasera. Da igual como sean las curvas que quieras trazar al volante del RS6 el aplomo que tiene y que ofrece todo el conjunto es espeluznante, tanto, que puedes ir muy rápido con el sin apenas advertirlo. De esto nos dimos cuenta pues tuvimos la ocasión de hacer una ruta de puertos de montaña, pensando que la estábamos haciendo rápidos, y más rápidos todavía pudimos acabar nuestra prueba en el circuito.

Destacar también que los frenos que equipa de serie de acero perforados y ventilados de 390 mm con pinzas de 6 pistones, son más que suficientes para detener a este deportivo cuando lo lanzas.

Las prestaciones de este Audi, todo y tratándose de lo que podríamos llamar un Avant familiar lo dicen todo. Acelera de 0 a 100 km/h en solo 3,9 segundos y su velocidad está auto limitada a 280 km/h. Como ya hemos comentado, instalando un paquete denominado “dynamic plus”, podemos lanzarlo hasta los 305 km/h.

Comenzamos nuestra prueba junto a una ruta organiza por de nuestros partners parasus clientes, que iban calzados la mayoría de ellos con deportivos de dos plazas. Una preciosa ruta escogida por nuestro amigo David Blanchart, nos llevó por parajes preciosos, así como por diversas carreteras de montaña en las que empezamos a ver como el RS6 metro tras metro, se convertía en el coche de nuestros sueños, pues nada tenía que envidiar, al resto de coches que le rodeaban.

Adelantar es tan fácil como pensarlo y hacerlo. La sensación cuando hundes el pie en el acelerador es como si te tele transportaras a donde habías pensado colocar el coche tras el adelantamiento. Tiene un empuje, una aceleración brutal, así como una capacidad de recuperación que en pocos coches a día de hoy hemos visto. Tras unos 120 kilómetros disfrutando del potencial del Audi, nos dirigimos donde de verdad comenzaba nuestra prueba de verdad, al Circuito de Catalunya.

Entramos al circuito, en este caso y en estas 3 primeras vueltas de toma de contacto, como acompañantes de un instructor, que no estaba familiarizado con el coche, por lo que nos pide que le quitemos al RS6 todas las ayudas electrónicas y así lo hicimos.

Salimos a pista, tras recorrer los primeros metros, dar cuatro volantazos para calentar los neumáticos, llegamos a la primera curva, el velocímetro ya marcaba casi 200 km/h entramos en ella y seguimos para continuar el trazado en busca de lo que un piloto a manos de este coche sería capaz de ofrecernos. Tras la última curva antes de llegar a la recta, nada había sido excepcional en la conducción, pero tras pasar esa curva, nos advierte y nos dice: “ahora empieza la vuelta de verdad”. Llegamos a la línea que marca los 100 metros del final de recta, con la aguja postrada en los 250 km/h, tras soltar el pedal del acelerador y dar un pisotón al freno el RS6 reduce la velocidad drásticamente, con el fin de pasar con el coche recto en la primera de las curvas, en la tercera, y tras pisar a fondo, empezamos a ver como la parte trasera quería deslizarse en busca de emociones, pero el RS6 corrigió la trazada.

Sentados en el asiento de copiloto, con una persona que conduce y sabe muy bien lo que se hace, está claro, buscas hacer lo mismo cuando tu conduces, por ello estuvimos atentos a como este piloto, condujo el RS6 hasta llevarlo al límite durante dos vueltas que a nosotros a modo de clase de perfeccionamiento nos sirvió de mucho. En estas dos vueltas, vimos en varias ocasiones como la parte trasera del coche quería adelantarnos. 

Nos toca a nosotros, tras la vuelta de refrigeración de frenos y motor, y tras comentar los puntos más críticos donde el coche se mostraba más inquieto, entramos al pit lane para cambiar de sitio y ponernos al volante. Acomodados ya, salimos de nuevo a pista, para completar una primera vuelta de forma alegre, pero sin buscar el límite del coche. Tras pasar por la línea de meta, gozando del sonido del V8, llega la hora de detenerlo, hundimos el dedal de freno hasta el fondo, y tras unos segundos trazamos la primera de las curvas con los neumáticos chillando, aguantando a todo el conjunto firmemente en el asfalto. Llegamos a la séptima curva del Circuit (los que hayan conducido aquí sabrán de que les hablamos) y tras frenar un poco para adentrarnos en el peralte, conseguimos cruzar el coche como si de un tracción trasera se tratara, y sorprendentemente el diferencial trasero tras dejar el pedal del acelerador, nos devuelve al coche al sitio. Es impresionante la capacidad de tracción que este coche tiene, pero más sorprendente es la capacidad de recuperación que ofrece.

Hacemos un poco de caso omiso a las indicaciones del piloto que nos acompaña, y de nuevo, intentamos cruzar el RS6 en la pista, para ver cómo una vez más, su comportamiento es tan noble que enseguida todo se pone en su sitio. Tras 4 vueltas al circuito, más una para refrigerar bien el motor y los frenos, nos dimos cuenta del potencial que el RS6 es capaz de ofrecer, por sacarle alguna pega, tan solo podemos decir que los frenos cerámicos son una buena opción si te vas a comprar este coche para meterlo en un circuito.

De nuevo, llegamos al pitlane, y alguien que conducía un coche rojo biplaza con 570 cv  con el que tuvimos la ocasión de compartir nuestras vueltas, nos dijo: “no había manera de que os fuerais de mi retrovisor, tan solo en la recta os he podido sacar algo de ventaja, pero cada vez que miraba, estabais ahí”.

Hemos tenido ocasión de probar otros coches en un circuito, y la vedad, es que el RS6 nos ha dejado tremendamente sorprendidos por su comportamiento. Si buscas un coche para todo, para correr, para viajar, para disfrutar conduciendo el RS6 es una alternativa real con la que puedes llegar en más de una ocasión a desafiar lo que otros deportivos temen, a la gravedad.

Una vez más podemos afirmar, que los coches no son solo para conducirlos, sino también para sentirlos y el RS6 es una gran muestra de ello.

Escrito por, Miguel Angel Solá

Agradecimientos

• Audi España

• CarsGallery

• Configurador Audi RS6 : http://microsites.audi.com/rs/index.html?locale=es_ES#/rs6avant/start

• Fotografías : Javier Lorite y Miguel Angel Solá