La firma de inversión Kingdom Holding Co (KWC), perteneciente al jeque multimillonario de Arabia Saudí, Alwaleed bin Talal, ha comprado el 1% del gigante norteamericano del motor por 365 millones de euros, poco después de que el fabricante chino SAIC se hiciese con el control de 15,15 millones de acciones, otro 1% de General Motors.