Científicos australianos anunciaron que han logrado integrar un fragmento de ADN del tigre de Tasmania, una especie extinta en 1936, en un embrión de ratón. Andrew Pask dirigió el equipo del departamento de Zoología de la Universidad de Melbourne, que realizó el experimento. Pask explicó que es la primera vez que se utiliza el ADN de una especie desaparecida "para inducir una respuesta funcional en otro organismo vivo".