Natura & Co ha estado buscando vender The Body Shop durante varios meses, motivado por la disminución de beneficios en el último año y la caída de los márgenes de The Body Shop.
En respuesta, la dirección tomó medidas como una estricta contención de costos, estimulación de la demanda de franquiciados principales, aprovechamiento de oportunidades para gestionar niveles de inventario y optimización continua de la afluencia en tiendas. Fondos como Apollo Global Management, CVC Capital Partners y Blackstone, a través de Morgan Stanley, habían mostrado interés en la adquisición.
Ambas valoraciones están por debajo de la cantidad que Natura pagó por la adquisición de The Body Shop en 2017, cuando compró la cadena a L’Oréal por 1.049 millones de euros.
Esta venta representa la segunda realizada por Natura este año como parte de su estrategia para reducir deuda, habiéndose cerrado previamente un acuerdo con L’Oreal para la venta de la marca australiana Aesop por 2.355 millones de euros.
Los resultados más recientes de Natura & Co, presentados en septiembre, revelaron un crecimiento del 0,6% en las ganancias, alcanzando un total de 2.840 millones de euros. The Body Shop, por otro lado, registró cifras negativas tanto en facturación como en ganancias, siendo la marca de menor contribución al total de ingresos del grupo y mostrando el desempeño más desfavorable en el primer semestre.
