Un supergrupo de deportes de acción
Las dos compañías han formado un súper grupo de deportes de acción, y Agnes dice que “crear una plataforma global integrada permitirá a la compañía combinada mejorar sus inversiones. Esto será en innovación y calidad de productos, marketing digital, participación del consumidor, y el comercio electrónico, que en última instancia beneficiará a nuestros consumidores y fortalecerá la empresa y la industria.
“Creemos que esta transacción representa el mejor valor para todos los stakeholders, ya sean accionistas, empleados, vendedores o clientes”, ha explicado el consejero delegado de Boardriders, Dave Tanner. Se espera que la operación se cierre el próximo 24 de abril.
"Con una plataforma más grande y más sólida, vemos muchas oportunidades emocionantes para nuestros empleados, clientes, proveedores y atletas. Estoy emocionado y es un honor pasar el testigo de liderazgo a Dave y continuar colaborando con él para conducir la siguiente fase en la evolución de Boardriders “.
Boardriders alabó al presidente de Billabong, Neil Fiske, y espera que forme parte de las dos compañías en el futuro: “Tenemos gran aprecio por Neil y por lo que ha logrado a lo largo de los años. Personalmente, he valorado su agudo pensamiento estratégico y liderazgo. Espero sinceramente que se una a nosotros para la próxima etapa de este viaje y continúe su contribución a estas grandes marcas “, dice Matt Wilson, presidente de Boardriders y director general y co-portfolio manager de Oaktree.
La última oferta que presentó el dueño de Quicksilver fue de 260,5 millones de euros. La oferta supone un desembolso de 0,65 euros por acción. El accionista mayoritario de Boardriders, el fondo Oaktree Capital Management, ya controlaba el 19% de Billabong, y elevaría ahora su participación hasta el 81%.
De la unión de Quiksilver y Billabong resultaría un negocio con más de 7.000 puntos de venta en el canal multimarca en más de 110 países, así como una red comercial por encima de las 630 tiendas. Juntas generan unas ventas de unos 1.660 millones de euros anuales.
Billabong engrosó sus pérdidas en la primera mitad del ejercicio (periodo cerrado a 31 de diciembre). La compañía australiana concluyó sus seis primeros meses con unos números rojos de 11,7 millones de euros. Las ventas de la compañía se situaron en este periodo en 301,8 millones de euros.