Con menos de cien millones de euros invertidos en la compra de acciones de las inmobiliarias cotizadas, se ha conseguido que éstas se reavalorizaran en 2.300 millones, en tan sólo una semana. Tras dos años de caídas, las inmobiliarias cotizadas han vuelto a protagonizar un rally alcista que permite recordar las épocas anteriores del boom, cuando cada día amanecía con una nueva operación de adquisición, fusión, u opa. Ahora, tras esta subida de sus acciones de un 50 por ciento de media, en tan sólo una semana, parece que no hay nada más detrás. Tan sólo una cuestión técnica. El escaso capital libre en bolsa de estas empresas, unido al bajo volumen de negocio que intercambian, permite que estos valores se disparen.Las ocho inmobiliarias principales cotizadas en bolsa han negocio 93 millones de euros, cantidad que les ha permitido ganar, en la capitalización bursátil del conjunto, la nada despreciable cifra de 2.300 millones de euros.