Un nuevo hotel de lujo ubicado en Igeldo nace de la mano de Pedro Subijana, uno de los chefs más famosos del mundo con sus tres estrellas Michelín en su restaurante Akelarre, que ha transformado la antigua discoteca Ku en un pequeño hotel de lujo con 21 selectas habitaciones que incluye galeria de arte y spa. La familia Nozaleda, propietaria del Balneario de Panticosa y de las Bodegas Enate, pidieron al cocinero asesoramiento gastronómico. Su rechazo inicial fue vencido con buenas artes y con una amistad que fue creciendo con el paso del tiempo. Pedro solicitó a cambio ayuda para hacer algo con los cimientos de su restaurante, la antigua discoteca Ku, un local cuyo declive fue «todo un lastre» para el restaurante y que tras mil avatares quedaba definitivamente en sus manos.
Restaurante y hotel tendrán una entrada acristalada común desde la zona del aparcamiento. En el primer nivel, bajo el restaurante, un salón dedicado hasta ahora para banquetes especiales, alojará en el futuro una gran sala para servir los desayunos, que dará acceso a una amplia terraza con vistas al mar, un jardín de hierbas aromáticas transitable por los clientes del hotel. En este mismo nivel se ubicará una pequeña galería de arte, que pretende aportar «algo más que alojamiento» a una clientela que llega a la ciudad tras visitar el Guggenheim o Chillida Leku. En Las habitaciones de Akelarre se pretende que casi nada sea como en un hotel convencional. No lo será, desde luego, el subir y bajar a las diferentes plantas. Además de los ascensores, una espectacular y rotunda escalera en acero corten, una obra de arte en sí misma -diseñada por los arquitectos del proyecto y ejecutada en los talleres de Construcciones Metálicas Adarra (Hernani)-, bajará desde la recepción hasta la tercera planta sótano. Lo que en su día fue la discoteca Ku hoy se transforma en un moderno spa que, como todas las dependencias, mirará al mar a través de unos amplios ventanales. Las 21 habitaciones se distribuirán en dos plantas bajo el jardín. .
Amplios espacios en blanco y negro, vestidor, cuatro ambientes lumínicos a elegir desde un pequeño display, duchas de agua nebulizada, un rincón acristalado para el inodoro donde ves y no te ven, televisión de plasma, muebles del baño de corian... Los pasillos que dan acceso a las habitaciones estarán vestidos de negro con luces tenues en suelo y techo. Otra curiosidad: la pared del corredor que une las dependencias estará decorada con estratos de piedra que emularán los trabajos de excavación que se han tenido que hacer.
Nombre: Las Habitaciones de Akelarre.
Habitaciones: 21 de diferentes tamaños: una suite de 63 m2, 14 de 43 m2 y el resto de 38 m2. El hotel tendrá spa y un jardín transitable.
Categoría: Cinco estrellas.
Diseño: Los arquitectos de la obra son Jon y Eneko Uranga, y Marian Galparsoro. El encargado de la decoración es Joseba Mitxelena.
Arte: El hotel incorpora una galería de arte, en la planta de transición entre la recepción y las habitaciones.
Restaurante: Chef Pedro Subijana
