El cineasta británico Danny Boyle, director de , y la fundación que creó tras el rodaje de la película triunfadora de los últimos Oscar, han comprado una casa para uno de los niños protagonistas de la cinta, Azharuddin Ismail. El niño de nueve años que hizo el papel de Salim, que será realojado después de que él y su familia fueran obligados a abandonar la barriada en la que vivían. También se pretende realojar a Rubina Ali, la niña que hizo el papel de Latika, y a su familia. Tras el rodaje, Boyle y el productor Christian Colson crearon la Fundación Jai Ho, cuyo objetivo es ayudar financieramente a los menores que trabajaron en la película hasta su mayoría de edad.