
En el año 2000, el Gremio de Pastelería de Barcelona impulsó la creación del Museo del Chocolate, en el que se exponen una serie de obras únicas y se repasa la historia del trabajo artesanal de cientos de maestros chocolateros que han forjado la historia de esta tradición a fuerza de horas de trabajo y de creatividad.

Al lado del Museo se encuentra la Escuela de Pastelería del Gremio, todo un referente internacional en formación de futuros pasteleros y maestros chocolateros de todo el mundo.
¿Cuál es la tendencia en monas?
Con la mona más viva que nunca, los padrinos volverán a tener que escoger forma y color. Según explica Olivier Fernández, director de la Escuela del Gremio de Pastelería de Barcelona, “es difícil predecir cuáles serán las monas más vendidas este año.

No les podemos pedir demasiada imaginación a los pasteleros…”. De todas formas, Fernández apuesta que las tradicionales figuras de personajes de Disney o Pixar, así como los cachorros de la Patrulla Canina o las figuras de jugadores del Barça quedarán eclipsadas “por las monas de autor de productos atemporales, donde lo importante es el tipo de chocolate (natural) y sin uso de azúcares, consiguiendo el color con frutas liofilizadas, no con colorantes”.

Los pasteleros dedican una media de tres horas de trabajo a cada pieza que, de forma artesanal, se elaboran con cacao de calidad, sin aditivos, ni aceite de palma, ni grasas ‘trans’ o colorantes azoicos. Además, igual que otras piezas de pastelería artesana, las monas actuales se adaptan a las nuevas tendencias, como la reducción de azúcar en el clásico bizcocho (con mantequilla, chocolate y fruta confitada).
